Primer Testimonio 2016-2017 Kissimmee, Fl (accidente ocurrió en Melbourne, Fl) Recuerdo q era el fin de semana de Acción de Gracias acá en la Florida. Ese día a Dios Gracias que no tenía a mis nietos en el carro pues la mayoría del tiempo estoy con ellos. Mis hijos andaban en un segundo carro porque el mío estaba lleno de los motetes en buen español y demás cosas para llevar a casa de mis hermanas. El viaje era como de 1 hora y media, yo los seguía a ellos. Cuando ya estábamos llegando pues sólo faltaban 20 minutos, me estaba dando sueño. Entonces pues me di palmadas en la cara y me enderecé el cuerpo para estar más alerta en la carretera. Hermanos no sé cómo me quedé dormida espontáneamente y lo que me hizo despertar fue el ruido de las gomas barriéndome por el pasto. Mis hijos que iban al frente vieron que el carro estaba descontrolado, pero fue en ese instante que empieza el carro a barrerse más e impacte otro auto y ahí mi carro empezó a dar vueltas. En ese momento clamo a Dios y le digo “Señor en tus manos pongo mi vida” y presioné mis manos fuertes a la parte de arriba del carro y me dejé ir pues ya había perdido el control. Ahí empiezo a dar vueltas una y otra vez, creo que di como de tres a cuatro vueltas. Recuerdo que el carro se detuvo unos segundos, pero estaba hacia arriba y de repente se volteó y cuando se enderezó sobre las cuatro gomas todas se explotaron. Gracias a Dios que tenía el cinturón puesto porque si no hubiese salido disparada por el cristal del frente. Al enderezarse el auto mi cabeza aterrizó en la esquina de la ventana donde recibí un fuerte golpe en la frente lado izquierdo y parte de la cabeza. Comenzó un sangrado imparable y entonces el papá de mis nietos rápido llegó allí y estaba tratando de sacarme, pero las puertas estaban pilladas. En su desespero empezó a darle patadas a la puerta hasta que abrió. Entonces yo escuchaba la gente con gritos diciéndole, avanza sácala q el carro está liquiando gasolina. Pero yo no podía avanzar porque me sentía inmóvil de la pierna izquierda entonces el prácticamente me arrastró lejos del auto. Gracias a Dios q nunca se encendió. Mi pobre hija gritaba desesperada, que por cierto estaba embarazada y yo la escuchaba y con mi voz le susurraba y le decía ya tranquila que aún estoy viva. De repente; El Señor es bueno mis hermanos, comenzaron a llegar mucha gente allí y para la Gloria De Dios la ayuda que recibí antes que llegara la ambulancia fueron ángeles y profesionales. Recuerdo que la primera ayuda q recibí fue de una muchacha que por problemas personales no podía estar fuera de su condado, pero ella estaba allí con el propósito De Dios para decirme tranquila Dios está contigo, me lo repetía una y otra vez. Esas fueron las primeras palabras que recibí de parte del Señor y los demás eran una enfermera graduada vestida con su uniforme del Navy una Rama Judicial y otra enfermera más. Dios cuida a los suyos, Llegó la ambulancia aérea y rápido llegué al hospital donde recibí 34 puntos en la cabeza y 32 en la pierna izquierda. Me hicieron exámenes de la cabeza para verificar que mi cerebro estuviera bien y gracias a Dios pasé todos los exámenes craneales. Antes de cerrar este testimonio quiero mencionar que soy paciente de amnea del sueño y que fue un grave error no usar el CPAP que es la maquinita de dormir, yo misma dejé de usarla, tal vez si la hubiese usado como la uso ahora que no la dejé ni en las cuestas a donde quiera que voy, quien sabe si se hubiera evitado el haberme quedado dormida. Pero Dios sabe todas las cosas y porque viví esta experiencia. Pero hermanos yo tengo un propósito en esta vida, quiero seguir perseverando hasta encontrarlo. 2do Testimonio a finales de enero 2020 Kissimmee, Fl Vuelvo a viajar a Melbourne, pero tranquilos hermanos esta vez no me accidente fui a llevar a mi hermano a una cita médica y cuando estábamos regresando me empiezo a sentir mal, pero muy mal. Traté de visitar un centro ambulatorio, pero no pude atenderme pues era muy costoso. Decidí llegar a casa y me di un baño me hizo un té y me acosté. Seguí sintiéndome mal, con mucha fiebre y un dolor de cabeza estallador. Así pase la noche. Al otro día voy a mi doctora y me dice tienes mucha fiebre y tus pulmones no se oyen bien. Les cuento que los resultados de la placa decían que tenía pulmonía. Me dieron terapia respiratoria y la doctora me dice si sigues así tienes que ir al hospital. Pues sí, terminé en el hospital donde me tuvieron que poner 12 litros de oxígeno a todo vapor en buen español. Fui hospitalizada por 17 días, di positivo a influenza B también, batallando con dos condiciones porque cuando bajó el diagnóstico tenía doble pulmonía. Mis pulmones quedaron afectados y también me diagnosticaron con “COPD” Obstrucción crónica pulmonar, No mejoraba, mi opinión personal es que creo q quizás me dio COVID, porque tenía todos los síntomas, pero nunca fui diagnosticada pues aún no había empezado oficial la epidemia, pero si no me equivoco, sí hay casos registrados en enero del 2020. Luego me hicieron muchas pruebas pulmonares, pero no las pase pues me fatigaba mucho. Luego me trataron como una paciente diabética pues el tratamiento de esteroides provocó esta condición y luego me empezó una tachycardia donde también entraron los cardiólogos a mi cuadro clínico. Yo no veía mejoría hasta me despedí de mis hijos. Pensé que el Señor me estaba llamando. Una noche en el hospital me acordé de una alabanza la cual dancé una vez y me acuerdo que dancé toda la noche esa alabanza como hasta las 2:00am y me sentía en una nube festejando con los ángeles y aún estaba a tachada al oxígeno. Las enfermeras me decían relájate que te vas a fatigar, pero yo no sentía nada en ese momento estaba transportada totalmente. Para la Gloria De Dios como a los 14 días empecé a mejorar. Me bajaron el oxígeno a 6 litros pues ese era el número que los médicos querían para poder darme de alta, pero aun con oxígeno. Estuve 3 meses en rehabilitación en mi casa con terapias físicas y ocupacionales. Perdí mi trabajo pues no pude regresar porque los médicos no me daban de alta. Pero, aun así, hermanos no me faltó nada, ni techo, ni sustento ni alimento porque EL NUNCA TE ABANDONA PQ EL ES FIEL. Hasta hoy día sigo visitando los médicos, pero como para el mes de marzo/abril del año pasado me retiraron el oxígeno, se me normalizó la diabetes por ende me quitaron los medicamentos y recuperé mis niveles de oxígeno y mis pulmones están a un 90% de mejoría, aunque la parte inferior de los pulmones estén un poco afectados, los médicos me dicen que es normal por la doble pulmonía que sufrí. Ellos dicen que es difícil de curarse de COPD y que para ellos ya no padezco. Eso lo hace DIOS. Recuerdan cuando les conté que no usaba mi CPAP para dormir, pues para esta experiencia tampoco la usaba por eso mis niveles de oxígeno eran tan bajos y fue algo súper negativo para mi mejoría. Según los médicos, mi cerebro acostumbró a mis pulmones a respirar con tan bajo oxígeno. Por eso es que digo q ahora no suelto mi CPAP NI EN LAS CUESTAS. Hermanos fui TERCA no se puede jugar con la salud. Lo que necesites para tu salud, hazlo porque las consecuencias no son favorables y porque me costó mucho pero mucho poder normalizar mis niveles de oxígeno. En conclusión, estos son mis testimonios que llevaba guardados dentro de mí y que sentía que tenía que desprenderlos y contar las maravillas de un Dios Poderoso y que mejor momento que aquí en este hermoso MINISTERIO CAMINANDO POR FE para que el pueblo escuche que EL ESPÍRITU SANTO VIVE DENTRO DE MI Y TAMBIÉN PUEDE ESTAR DENTRO DE TI, SOLO ÁBRELE TU CORAZÓN Y DÉJALO ENTRAR.